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domingo, 5 de octubre de 2014

Abismo

Haz lo que quieras de ti mismo.
Si necesitas ir por la vida creándote demonios, hazlo.
Si te encanta esa obscuridad que llena de soledad hasta al alma más fuerte, súmete en ella.
Si estás satisfecho hundiéndote en el mar de lágrimas, que finges no tener, que guardas para tus adentros, pero existen, entonces ahógate en ellas.
Haz lo que quieras, pero no me jales contigo. Sabes que caeré. Que si me lo pides, volveré. Y no quiero.

En algún momento me perdí y creí que por amarte debía de vivirte tanto, hasta acabar en el mismo abismo en el que tú habías caído. Estaba tan dispuesta a servirte de apoyo para que tú salieras, aunque eso significara que pasaras por encima de mí.
No entendía que ni yo podría sacarte porque no estás dispuesto a salir, ni podría salir después, porque en definitiva, tú no me ibas a ayudar, sino retener.

Quise ser luz y me apagaste. Quise ser fortaleza y no sólo me hiciste débil, sino que te convertiste en mi debilidad. Todos mis esfuerzos, en vano, fueron malgastados mientras me volvía más como tú, en vez de ayudarte a ser un poco más el mejor de ti mismo.

Una fuerza arrolladora, que desconocía que había en mi, me ayudó a salir adelante. A salir a la luz en lugar de quedarme en esa, tu alma, que está en tinieblas.

Tuve que aprender a la fuerza, a base de dolor y lágrimas, que fueron imparables durante mucho tiempo, que no podía salvarte si tú no querías ser salvado. Y que no podía esperar tu amor, uno que te empeñara en colorear la vida para los dos, si no sabes ni cómo quererte a ti mismo.

Lo entendí. Hoy he dejado de luchar por ti, para empezar a luchar por volver a ser la misma que era antes de que me sucedieras. Tuve que comprender que estás ya tan cegado, que no puedes ver que hundes con malicia a quien esté dispuesto a hundirse por ti de buena voluntad; que no puedes encontrarle el sentido a ver por alguien y amar, porque no te importa ni siquiera el daño que te haces a ti mismo.

No es egoísmo, es que simplemente creo que ya es muy tarde para ti.




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